Hace apenas unos días el Ayuntamiento de Córdoba, atendiendo a una iniciativa del Círculo Taurino de la ciudad declaraba la Fiesta de los Toros como Patrimonio Cultural Inmaterial. En Roquetas de Mar días atrás también se dieron cita diversos colectivos taurinos para firmar un manifiesto solicitando la declaración de los toros como Patrimonio Cultural Inmaterial.
Córdoba tiene un pasado taurino esplendoroso y Almería en el presente cuenta con un movimiento peñístico importante. Ambas cosas justifican la iniciativa.
Entre Córdoba y Almería se asienta Jaén, con un envidiable campo bravo, una enorme afición, una cantidad tremenda de plazas de toros y una ebullición taurina incesante a lo largo del año.
¿Sería posible una iniciativa así a nivel provincial? ¿Podría el Ayuntamiento o la Diputación verse votando a favor de la Fiesta en una pleno?
Cierto es, y así lo reconocemos que en Beas de Segura ya dieron hace poco el primer paso adelante, independientemente de colores y pensamiento, en este sentido. Su ejemplo podía contagiarse.
