Al entrar a la conocida taberna “La Manchega” por su entrada de la Calle Arco del Consuelo, en su estrecho pasillo nos encontraremos con carteles de toros de gran formato. Carteles antiguos de toros de Jaén.
Llama la atención los carteles de finales de la década de los noventa que se corresponden a la feria de la Virgen de la Capilla. Por aquel entonces era empresario Paco Dorado y en aquellos años él dio toros en Jaén por junio como nunca antes se había conocido.
En Jaén, en mayor o menor medida, casi siempe había toros por junio con motivo de la feria de la Virgen de la Capilla. Alguna corrida algún año, alguna corrida de rejones o si acaso una novillada con picadores. Un sólo festejo, como mucho, dentro de la programación de la feria para darle un toque taurino a la feria menor de la ciudad.
Con la llegada del “Comandante” Dorado al Coso de la Alameda no sólo la feria de San Lucas se disparó hasta límites impensables, sino también la feria de la Virgen de la Capilla. En su primer año anunció seis festejos, siendo uno de ellos una corrida de rejones con cuatro rejoneadoras (un cartel bastante popular en aquella época) y una corrida de toros con…¡Rafael de Paula! .Sí, con el torero de Jerez, quien compartió cartel con Jesulín y Litri en la que fue el último paseíllo de Paula en Jaén. Y junto a todo eso el añadido de cuatro novilladas sin picadores. Aquel año se fundó la Escuela Taurina de Jaén y en la capital había varios noveles – Eduardo Ortega, Juan Peco, Antonio Sutil entre otros- que andaban toreando ya de luces. Esto hizo desperar en cierto modo el letargo taurino de la ciudad, y de ahí ese boom de los festejos de promoción.
Al año siguiente, se repitió la fórmula sólo que la feria exclusivamente se programó con novilladas de promoción. Cuatro días seguidos, cuatro novilladas y en todas ellas el aliciente del jovencísimo rejoneador que había surgido en la ciudad ese mismo año: Álvaro Montes. Actuó cuatro tardes seguidas en la plaza de toros de Jaén, abriendo cartel. Aquello indudablemente le sirvió para darse a conocer en Jaén, ante su afición y sus paisanos.
Tras aquellos dos años tan intensos, la fecha de junio se siguió manteniendo con algún festejo simbólico. La empresa Taurotoro en su paso por Jaén en cuatro años se limitó únicamente a organizar una exhibición de recortadores en 2006 y luego Serolo si recuperó la fecha, organizando dos corridas de toros que al margen del resultado artístico fueron dos auténticos desastres. En 2008 se anunciaba una terna local con el regreso de Fernanco Cámara, “Carnicerito de Úbeda” y Curro Jiménez ante toros de Jiménez Pascuau. Al año siguiente, un inexplicable cartel formado por el sevillano Álvaro Ortega, el matador de Andújar David Valiente y Joselito Adame (sí, como lo leen) con toros de Sorando. En los tendidos, no había ni cientocincuenta personas…
Ese fue el último festejo que se organizó con motivo de la Virgen de la Capilla. Hoy 11 de junio, día de la Patrona de Jaén, no está de más mirar atrás y repasar un poco nuestro pasado taurino para recordar que efectivamente esta fecha siempre tuvo su importancia dentro de la temporada taurina de la plaza de Jaén.
