En Córdoba andan de celebración estos días. Previo a la Feria de la Salud semanas atrás conmemoraron el cincuentenario del Coso de los Califas y lo hicieron a lo grande, dándole a la efeméride toda la importancia que tiene.
Transformaron el tradicional festival taurino a beneficio de la Asociación Española de la Lucha contra el Cáncer en corrida de toros. Y no fue una corrida al uso ya que se acarteló para la ocasión a un sexteto que contó con la presencia de algunas de las principales figuras del toreo, abriendo cartel Juan Serrano “Finito de Córdoba” y cerrando el mismo Julio Benítez “El Cordobés”. Toreros de la tierra.
Por delante en el paseíllo, la terna que cincuenta años atrás inauguró la plaza cordobesa: José María Montilla, Manuel Benítez “El Cordobés” y Gabriel de la Haba “Zurito”.
Se cuidaron los detalles, hubo sensibilidad y la gente respondió a una corrida que se celebró fuera de las fechas de feria. Dato importante a tener en cuenta.
Uno vuelve la vista atrás, compara con su ciudad y le entra cierta envidia sana de ver cómo aquí hace dos años la misma situación – el cincuentenario de la plaza- se vivió de la peor forma posible, dejando escapar una oportunidad que ya no se repetirá.