Grave percance de Juan Carlos García.
Según se ha podido conocer en el programa «Carrusel Taurino» de Canal Sur Radio, presentado por Juan Ramón Romero, el banderillero jiennense Juan Carlos García ha sufrido un grave percance cuando actuaba en Villadiego, Burgos, a las órdenes del matador de toros de Cortijos Nuevos Alberto Lamelas.
Recordemos que Juan Carlos García, actualmente banderillero, es el último matador de toros con que ha contado la ciudad de Jaén.
Recibió la alternativa de manos de Ortega Cano en presencia de Enrique Ponce en la plaza de toros de Jaén en abril de 1995 con toros de Jerónimo Martínez.
Por su importancia, reproduzco íntegramente la noticia firmada por mi compañero Daniel Hernanz en Burladero.com
«Juan Carlos García sufre la fractura de tres costillas y una cornada limpia de 10 cm.»
El banderillero Juan Carlos García ha librado con fortuna un espectacular percance que pudo haber tenido consecuencias mucho más graves de lo que finalmente, tras realizarle distintas pruebas y un scanner, ha quedado en la fractura de tres costillas y una cornada limpia con trayectoria ascendente de 10 cm. en el tercio inferior del muslo izquierdo.
El percance, como ha relatado a Burladero su matador, el jienense Alberto Lamelas, se ha producido en la localidad burgalesa de Villadiego al «tratar de cerrarme el toro en el burladero al rematarlo yo con la capa. En ese momento, el animal se le venció y lo reventó contra las tablas. Todos nos asustamos muchos por lo fuerte del porrazo y porque empezó a sangrar por el oído, aunque finalmente los médicos han dicho que la hemorragia se debía a una herida superficial en la oreja», explica Lamelas.
El matador de toros y ahora subalterno, que presentaba un traumatismo craneal fruto del fuerte golpe, ha recuperado la consciencia y, aunque dolorido, se recupera en planta del Hospital de Burgos.
El percance, como ha relatado a Burladero su matador, el jienense Alberto Lamelas, se ha producido en la localidad burgalesa de Villadiego al «tratar de cerrarme el toro en el burladero al rematarlo yo con la capa. En ese momento, el animal se le venció y lo reventó contra las tablas. Todos nos asustamos muchos por lo fuerte del porrazo y porque empezó a sangrar por el oído, aunque finalmente los médicos han dicho que la hemorragia se debía a una herida superficial en la oreja», explica Lamelas.
El matador de toros y ahora subalterno, que presentaba un traumatismo craneal fruto del fuerte golpe, ha recuperado la consciencia y, aunque dolorido, se recupera en planta del Hospital de Burgos.
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