Por José Cisneros
Estamos en pleno invierno y las actividades taurinas no cesan por esta provincia de Jaén tan fructífera en ganaderías. En esta estación del año vamos alternando tertulias y conferencias con algunos actos sociales de los toreros.
En el campo bravo la actividad taurina tampoco cesa. Este viernes tuve la oportunidad de estar en el primer tentadero de hembras de este año que celebra la casa ganadera de “Cerropelado”, propiedad de los Herederos de D. Gregorio Garzón Valdenebro.
El ganadero D. Iñigo Garzón, consciente de mi afición, algo que no solo yo, sino que cualquier aficionado no podemos nada más que agradecer ya que no tendríamos con que pagar esos momentos de disfrute en el campo; como siempre que se celebra algún evento en su casa, me invitó gentilmente a dicho tentadero donde pude pasar una tarde inolvidable.
Se tentaron tres becerras procedentes de un nuevo semental de la casa, las cuales resultaron bravas y con una nobleza extraordinaria. Al tratarse de uno de los ganaderos que además torea, fue el propio ganadero quien tentó la primera de las becerras, siendo el matador de toros Julio Parejo el encargado de tentar las dos restantes.
En algo y con todos mis respetos, sí que tengo que contradecir a D. Iñigo cuando tras torear una de las becerras me comentó que me había visto como nunca delante de la cara de la becerra, templado, tranquilo y corriéndole bien la mano. Esto es algo que como aficionado práctico me halaga, pero la realidad en mi humilde opinión es muy distinta; pues conociendo mis limitaciones con cincuenta años a la espalda, he de decir que en realidad aunque disfruté mucho; el secreto estuvo en la calidad de las becerras, de esas que los aficionados conocemos como “vacas que enseñan a torear”. Y es que no es de extrañar dada la exigencia en los tentaderos que este ganadero aplica a sus productos procedentes de Núñez del Cuvillo, que cada temporada vemos como la calidad y nobleza en las becerras va en aumento, consiguiendo un toro con unas características fundamentales para el triunfo.
Mucho se ha hablado de las ganaderías que tenemos en la provincia de Jaén y de lo poco que son solicitadas por los empresarios que montan un gran número de festejos en la propia provincia, esta de D. Iñigo Garzón es una de las que más garantías de éxito ofrece a los toreros. Manuel Díaz “El Cordobés”, David Fandila “El Fandi”, Javier Conde, José Olivencia, Alfonso Romero o Manuel Amador son algunos de los muchos toreros que han podido paladear las mieles del triunfo frente a los toros de esta ganadería que merece más sitio dentro del gran elenco de festejos que se celebran en esta provincia de Jaén, tierra taurina y ganadera por excelencia.
Gracias ganadero por haberme hecho disfrutar de una tarde con las que sueña cualquier aficionado práctico como es el caso.
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